El Rey ha sido dado de alta hoy, tras siete días ingresado en el
Hospital Universitario Quirón, donde el pasado martes se operó por
cuarta vez de la cadera. Don Juan Carlos tendrá que volver al quirófano en siete semanas para reemplazar la prótesis provisional
recubierta de antibiótico que ahora lleva por una permanente. La
gerente del centro, Lucía Alonso, ha anunciado el alta al leer a
mediodía el último parte médico: "Ha completado de forma muy
satisfactoria el postoperatorio y ha conseguido autonomía suficiente
para los movimientos cotidianos. En las próximas semanas, don Juan
Carlos continuará con el tratamiento, las revisiones postoperatorias y
el programa de recuperación previsto, en régimen ambulatorio".
Pocos minutos después de la lectura del parte, el Rey ha abandonado el centro médico en coche. El vehículo ha parado unos instantes ante los medios congregados y, cuando los periodistas le han preguntado qué tal estaba, ha contestado: "Bien, Bien. Ya veis, estupendamente".
Pocos minutos después de la lectura del parte, el Rey ha abandonado el centro médico en coche. El vehículo ha parado unos instantes ante los medios congregados y, cuando los periodistas le han preguntado qué tal estaba, ha contestado: "Bien, Bien. Ya veis, estupendamente".
El cirujano que realizó la intervención, Miguel
Cabanela, ha regresado esta mañana a Rochester (Minnesota, EEUU), donde
lleva 40 años trabajando en la Clínica Mayo. Volverá un poco antes de la
segunda fase de la operación, en siete semanas, para sustituir la
prótesis temporal que ahora lleva el Monarca en el lado izquierdo de la
cadera por una permanente. Durante ese periodo será el jefe médico de La
Zarzuela, Miguel Fernández Tapia-Ruano, quien supervise la
rehabiltiación de don Juan Carlos. Cabanela insistió el pasado martes en
que no debía ser "agresiva" y recomendó caminar por la piscina.
El Rey camina ahora con ayuda de un andador y según
la previsión de Cabanela podrá desprenderse de las muletas dentro de
tres meses y medio. El cirujano recomendó el pasado martes que se tomara
las cosas "con calma". Así, don Juan Carlos no podrá asistir a la Fiesta Nacional del próximo 12 de octubre ni a la cumbre iberoamericana, en Panamá,
el 18 y el 19 del mismo mes. El Monarca mantendrá sus despachos
semanales con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, pero no
actividades oficiales públicas durante las próximas semanas.
Durante esta semana de hospitalización, la familia
real al completo ha visitado al Rey, incluida la infanta Cristina, que
viajó a Madrid desde Ginebra, donde vive desde finales de agosto, solo
para pasar unas horas con su padre. Doña Cristina acudió al hospital sin
su marido, Iñaki Urdangarin, pero acompañada por su secretario
personal, Carlos García Revenga, imputado en el caso Nóos.
Además de la familia, también han visitado al Rey Mariano Rajoy,
convencido de que el Monarca “saldrá pronto de esta situación”, la
vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, los ministros de Sanidad,
Ana Mato, e Interior, Jorge Fernández Díaz, y el líder de la oposición,
Alfredo Pérez Rubalcaba.
reportaje, foto: el país
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